Salud dental infantil: el futuro de su sonrisa

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Cuando un niño sonríe, su sonrisa marca su estado de salud y por supuesto, su estado de ánimo. Cuidar los dientes de un niño, significará cuidar su sonrisa en el futuro.

En Dentosalud queremos que esto sea una realidad, y un sueño que se cumple, por eso trabajamos cada día, para mejorar el tratamiento que aportamos a los niños, para que conserven el valor de sus dientes para siempre, y porque un niño feliz, siempre está asociado a unos padres satisfechos.

Para nosotros, la salud dental infantil es una prioridad, y en ese mismo sentido, facilitamos el proceso que se requiere para inculcar la disciplina del cuidado dental en los más pequeños de la casa.

CUANDO ACUDIR AL DENTISTA POR PRIMERA VEZ

Las revisiones dentales antes de lo estipulado por cuestiones de desarrollo habitual, nunca están de más, de hecho un buen momento es cuando el niño cumple un año.

Bien es cierto, que es una recomendación, ya que actualmente se viene gestionando la primera visita al dentista cuando se cae el primer diente.

Ese instante, hacia los 6 ó 7 años, es un momento para familiarizarse con los instrumentales de revisión dental, con las situaciones típicas de los dentistas, el sillón dental y los olores tan característicos, de forma que los niños aprendan a ir al dentista como si fueran a revisión de cualquier otra especialidad, sin que el miedo que suelen tener los padres a las visitas odontológicas, se contagie fácilmente a los niños.

Pero consideramos que todo lo anterior debe estar en la memoria del niño desde el primer año que hemos comentado, de forma que las posibles ideas irracionales acerca del dentista y su entorno, no lleguen a aparecer nunca.

 

A partir de ahí, se considera interesante que al menos una vez al año, si no existen grandes problemas de dentición, los niños acudan a realizarse una revisión anual, con el objetivo de instaurar un proceso de higiene y cuidados básicos, que mejorará la calidad de la dentadura en el mundo infantil, así como sus futuras sonrisas.

USO DE LAS VISITAS DENTALES

¿Para qué sirve acudir al dentista de vez en cuando? La respuesta a esta pregunta es bien sencilla, el tema está en que cualquier componente del organismo infantil, debe ser cuidado y revisado por especialistas en cada momento de su desarrollo normal, por esto, las revisiones odontológicas en niños, se precisan como un hito muy importante a tener en cuenta, para mejorar la salud dental de los pequeños, y para apostar por un futuro dental lleno de sonrisas.

El objetivo de las revisiones anuales es la detección de posibles caries ya formadas, o incipientes, que con el tratamiento adecuado puedan hacer que ese trauma no siga creciendo y afectando al material orgánico que compone dientes y muelas en los niños.

Los famosos dientes de leche conforman el mecanismo de dentición y masticación de la odontología infantil, y un buen cuidado en esos primeros dientes, puede marcar de una manera decisiva, el cómo serán los dientes definitivos. Al fin y al cabo, de lo que se trata, es de cuidar al máximo todos los componentes que van a hacer posible llevar una vida saludable y agradable, y por eso, cuidarlos desde antes de aparecer, con hábitos y rutinas apropiadas, asegura la salud dental, en el futuro de los niños con las mejores sonrisas.

PROBLEMAS DENTALES TIPICOS DE LA INFANCIA

El uso que los niños hacen de sus dientes, en ocasiones suele ser incorrecto y muy sacrificado, ya que en cualquier momento usan la boca para todo. Los problemas que suelen aparecer en las bocas tempranas son los siguientes:

  • caries en diversos grados de gravedad, ya que si afectan al nervio, habría que practicar pulpotomías.
  • colocación de mantenedores de espacio, que en situaciones complicadas como la anterior, permiten el crecimeinto adecuado de la pieza dental reparada.
  • problemas generales de maloclusión dental, que se suele corregir con aparatología especifica para dirigir de nuevo el crecimiento adecuado de la dentadura infantil.
  • en otros casos, también existen aparatos removibles que corrigen problemas de maloclusión, afectados por otros motivos como la succión digital, la deglución atípica u otros factores que pueden ocasionar problemas dentales en el futuro.

 

La aparición de los primeros dientes de leche suele estar asociado a grandes dolores, que los niños intentan calmar metiéndose objetos en la boca que calmen las encías o el proceso rompedor del diente en esa encía, y estos hechos a menudo crean situaciones de estrés y rabia para los más pequeños, que asumen que morder las cosas, sin importar la dureza de las mismas, es sinónimo de bienestar para sus bocas.

Por otro lado, cuando ya los niños disfrutan de sus primeras piezas dentales, las sonrisas es su carta de presentación, y eso unido al comienzo del gateo y el andar, hace que en las caídas a las que se someten por si mismos, sufran golpes que produzcan la rotura de algunos dientes, sobretodo, incisivos, que con el tiempo puedan acarrear otros problemas de desarrollo.

Cuando llega el momento de disponer de la dentadura como herramienta plenamente desarrollada para la masticación, hay que concienciar al niño de su cuidado, para que le dure mucho tiempo, y para conservar esas bonitas sonrisas infantiles a lo largo de todas sus vidas. Por esto, es fundamental educar en una correcta salud bucodental, adoctrinar en el correcto cepillado diario y frecuente, en la no utilización de los dientes como abridores de cajas u otros elementos, y en que entiendan que sus dientes no son armas para dar mordiscos a las cosas, sino una parte más del organismo, que pretende ser de utilidad infinita, y que hay que cuidar para que funcionen durante toda su vida.

LOS DIENTES DE AHORA SON LAS SONRISAS DEL FUTURO

Con esta máxima presente en todo tipo de tratamientos dentales infantiles, podemos dar por sentado que una correcta utilización de los medios disponibles para sanear y cuidar una boca infantil, será una cuestión de plena garantía para el futuro adulto de ese niño.

Educar en la correcta gestión de los dientes infantiles, con las herramientas adecuadas y los refuerzos necesarios en cada preciso momento, hará de la odontología infantil la mejor puerta hacia una odontología adulta de mantenimiento y revisiones, sin grandes complicaciones.

 

 

 

 

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