Hay varias causas por las que se puede perder una pieza dental: entre ellas por sufrir de caries, por un golpe o una caída. Cualquiera que sea la razón de la pérdida del diente, una buena solución puede resultar la colocación de una prótesis o implante dental.
Es que no se trata solamente de la función estética en el rostro que puede generar la pérdida de un diente, sino que también es necesario que se recupere dentro de la boca la función que la pieza cumplía.
Masticar con todas las piezas dentales, morder de igual forma, y mantener la función de la mandíbula equilibrada en todo momento, es fundamental para el buen funcionamiento de los dientes y las muelas, ya que solo así la función masticatoria obtendrá los resultados que los pacientes buscan a toda costa.
En Dentosalud sabemos que los implantes son una solución muy eficaz, y queremos que nuestros pacientes confíen en nuestras prácticas para llevarlos de una forma sana y estética.
IMPLANTES DENTALES: QUE SON
Los implantes dentales consisten en un procedimiento a través del cual se reemplazan las raíces del diente o de los dientes faltantes con una suerte de tornillos metálicos, llamados pernos. Precisamente en esta base de pernos se coloca el diente artificial, que tiene un aspecto idéntico al diente faltante y cumple las mismas funciones.
Este procedimiento es recomendable cuando hay dentaduras o puentes que no logran fijarse bien a la encía. También pueden resultar una opción viable cuando faltan las raíces de los dientes naturales y no se pueden crear dentaduras postizas.
Hay que comprender que esto es un procedimiento quirúrgico que se realiza en la mandíbula. Por eso es necesario que lo realice un profesional de la salud dental debidamente capacitado para ello, los cuales en Dentosalud tienen la experiencia suficiente para ello.
VENTAJAS DE LOS IMPLANTES DENTALES
Los implantes dentales están hechos con materiales especiales para que ocasionen la menor cantidad de molestias al cuerpo. Una vez que están instalados correctamente, no se deslizarán, siendo esta una de las mayores ventajas de este procedimiento.
Otra ventaja es que los implantes dentales no harán ninguna clase de ruido anormal, cosa que sí puede esperarse de una prótesis movible.
Por otra parte, un implante dental no causará tampoco ninguna clase de daño al hueso ni tampoco podrán romperse como los puentes regulares, porque no existe la posibilidad de que se desplace ni de que roce la encía en ningún sitio de la boca.
CUANDO ES ADECUADO PONER UN IMPLANTE DENTAL
Hay ciertas recomendaciones que los especialistas en salud bucal suelen indicar a la hora de ponerse un implante dental. La primera, por supuesto, es que tengas uno o más dientes en falta, es decir, que te falten piezas dentales para poder desarrollar la función principal de los dientes de forma satisfactoria.
Otra condición es que la mandíbula debería haber alcanzado su completo desarrollo. Además, también se debe chequear si los huesos están adecuados como para recibir tanto los implantes como injertos óseos, aspecto este que debe mirarse con especial cuidado y tiento.
En general, el estado de salud de la boca debe ser bueno, lo que implica que los tejidos orales deben estar saludables y no se deben padecer enfermedades que puedan afectar o condicionar la sanación de los huesos.
¿EXISTEN RIESGOS AL PONER UN IMPLANTE DENTAL?
El procedimiento para colocar un implante dental implica pasar por un proceso quirúrgico. Por eso, al igual que cualquier cirugía, tiene cierto porcentaje de riesgo.
Sin embargo, hay más bien pocos casos en los que ocurren problemas y generalmente, estos son de bajo riesgo y susceptibles de ser atacados y curados de rorma rápida y eficiente.
Los casos en los que ocurren problemas en este procedimiento suelen relacionarse con una infección en el sitio del implante, daños en otros dientes o vasos sanguíneos. También hay algunos casos en los que se han lesionado los nervios y el paciente siente una sensación de cosquilleo o dolor en los dientes naturales o en las zonas cercanas.
¿Cuándo se necesita un injerto óseo?
Hay algunos casos en los que la colocación del implante dental requiere también de un injerto óseo. Esto puede deberse a que la mandíbula es muy delgada o quizás muy blanda.
En este caso, el injerto óseo es necesario para soportar la presión que el acto de masticar ejerce sobre el hueso: si no tiene una base sólida, el implante podría fracasar. De lo que se trata es que a través de un injerto óseo, se crea una base más sólida para soportar el implante.
CUIDADO Y PREVENCION DE LOS IMPLANTES
La salud bucal no es cosa de juego: hay que prestarle la debida atención. Para cuidarla, es necesario tener una correcta higiene oral y acudir periódicamente al especialista.
Sin embargo, si necesitas hacerte este procedimiento, tienes que saber que deberás cuidar el implante y mantenerlo limpio, al igual que el resto de tus dientes naturales y encías.
Puedes usar un cepillo interdental que te ayude a llegar a todos los rincones para realizar una limpieza más profunda.
Una recomendación adicional es evitar masticar alimentos duros y evitar la cafeína y el tabaco, ya que se pueden dañar de forma definitiva los implantes, y lo que sería más grave, se podrían producir enfermedades de la encía y el hueso difíciles de subsanar, y en cierta manera, incompatibles con la naturaleza de los implantes dentales.
El cuidado y la prevención que se debe realizar de los implantes, debe ser muy meditado, ya que se cuenta con piezas artificiales que se supone serán para el resto de la vida, y coincidimos en la idea de que los dientes son para siempre, al menos así lo vemos en Dentosalud.